La elección del nuevo Papa revolucionó al mundo y en la moda surgió un debate: ¿quién vestirá a León XIV? Tras la designación del estadounidense Robert Prevost, confirmaron que el encargado del vestuario del sumo pontífice será el italiano Filippo Sorcinelli.
El diseñador, nacido en Mondolfo en 1975, tiene su propia firma de vestimentas litúrgicas y además es perfumista. Con estudios en música sacra y teología, sale de lo común en el mundo de la religión con su estilo disruptivo con tatuajes y piercings.
También vistió a Benedicto XVI y a Francisco. En su perfil de Instagram, donde lo siguen más de 80 mil usuarios, ya publicó imágenes de León XIV.
Cambiar es dejar de aferrarse. Deja que pase a través de ti, incluso cuando queme. Aun cuando todo pide seguir igual. Es un ejercicio de abandono, hecho de piel que se cae, de formas que se disuelven. Pero sólo quien se deja fundir puede convertirse en arcilla viviente", escribió en un posteo que compartió en sus redes sociales.
Sorcinelli empezó su camino en la vestimenta religiosa casi por casualidad, cuando le regaló a un amigo que se ordenaba sacerdote una vestidura a medida que captó la atención de un obispo cercano que asistió a la celebración y luego le encargó una pieza para él. Más tarde, se convertiría en obispo de Génova, y su influencia derivó en una llamada del Vaticano a Sorcinelli para crear los paramentos del Papa Benedicto XVI.
"Cuando me vieron por primera vez afuera con tatuajes, con pendientes, estaban un poco aterrados, tenían miedo de que me presentara allí así. Pero yo me los quito sin problema, porque, ante todo, profeso un profundo respeto hacia ellos", relató en una entrevista cuando se refirió a los protocolos del Vaticano y a cómo encaja en la institución.
"La liturgia es un conjunto de reglas. Y esas reglas deben ser estudiadas, porque los ornamentos y las vestiduras sagradas deben respetarlas. No vale cualquier cosa", agregó.