Los maestros hospitalarios son educadores que trabajan en contextos clínicos y domiciliarios, brindando apoyo educativo a alumnos que, por distintos diagnósticos, no pueden asistir a la escuela. “Empatía y capacidad de adaptabilidad a las situaciones que nos tenemos que enfrentar. Valorar la salud es un privilegio”, describe Marcela López, quien se dedica a esto hace 19 años.
En una charla con El Contestador (Radio 2) la docente contó con lujo de detalles cómo es un día a día dando clases a niños internados.
“Creo que estamos preparados para esto porque vamos forjando un perfil durante la carrera. Nos lleva a estar preparados para afrontar situaciones desfavorables, a veces con finales muy felices”, empezó.
Marcela pertenece a la Escuela Hospitalaria Nº 1391 y se dedica a esto hace casi dos décadas. “El día a día es ir al pie de cama a darle clases a un niño que sabemos que está enfrentando una situación difícil, de dolor, de sufrimiento”, relató.
Según contó, la propuesta de los docentes hospitalarios tiene un “objetivo pedagógico” que muchas veces se aplica “desde lo lúdico”: “Que el niño esté interesado, tratando que en ese momento de clase pueda olvidarse que está en el hospital. Que lo pueda disfrutar”.
Brindan clases a alumnos de 4 a 17 años. “Algunos están internados un día, otros meses y en algunos casos todo el año. De esta manera los chicos no repiten el año, van a la par de sus compañeros que están en la escuela. No tienen inasistencia en la institución de origen”, explicó.
“Enseñando pero también curando. Salgo del hospital y soy la mujer más feliz del mundo. Valorar la salud es un privilegio. Empatía y capacidad de adaptabilidad a las situaciones que nos tenemos que enfrentar”, sinceró su labor.
Durante la entrevista de Marcela con Radio 2, una oyente compartió un video de la promesa a la bandera de un niño junto a su docente hospitalaria e hizo emocionar a todos.
