Los líderes de Tailandia y Camboya accedieron a reunirse este lunes para negociar en Malasia después de cuatro días de enfrentamientos armados en su frontera compartida que dejaron más de 30 muertos y más de 200.000 desplazados.

El encuentro del primer ministro en funciones de Tailandia, Phumtham Wechayachai, y el primer ministro camboyano Hun Manet, en Kuala Lumpur fue anunciado por el canciller malasio, Mohamad Hasan.

Malasia ostenta la presidencia rotatoria de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y ya se postuló como mediador entre las partes en el segundo día de contienda, con una propuesta de alto el fuego por parte del primer ministro Anwar Ibrahim.

Tailandia confirmó más tarde la invitación de Anwar e informó de que el primer ministro interino viajará con una delegación que incluye al ministro de Exteriores, Maris Sangiampongsa.

Por su parte, el líder camboyano dijo la noche del domingo en su cuenta de Facebook que acudirá a la reunión que acoge Malasia y que ha sido "coorganizada por EEUU con la participación de China".

"El objetivo de esta reunión es alcanzar un alto el fuego inmediato que fue iniciado por el presidente Donald Trump y acordado por los primeros ministros de Camboya y Tailandia", apuntó Hun Manet.

El anuncio del encuentro de mañana se produjo horas después de que el presidente de Estados Unidos hablara con ambos mandatarios por teléfono.

El líder estadounidense dijo el sábado en su red social Truth Social que las dos naciones habían acordado "reunirse de inmediato y negociar rápidamente un alto el fuego" para solucionar la disputa en su línea divisoria.

Trump presionó además a las partes con la advertencia de que dilatará cualquier acuerdo arancelario hasta que se detengan las hostilidades.

Además de Washington, la ONU, Pekín, Bruselas, Japón y Moscú, entre otros, han hecho llamamientos a la contención y al diálogo por parte de la comunidad internacional.

Tanto Tailandia como Camboya se han mostrado dispuestas a iniciar negociaciones para alcanzar una solución pacífica al enfrentamiento que mantienen desde el jueves en zonas fronterizas disputadas.

Sin embargo, las hostilidades no han cesado y llegaron este domingo al cuarto día, con al menos 34 muertos, decenas de heridos y miles de desplazados.