Un nuevo estudio, proveniente del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) de España, demuestra que el corazón se origina a partir de dos poblaciones celulares diferentes que se forman independiente pero coordinadamente desde fases muy tempranas del desarrollo. Concretamente, cuando el embrión empieza a organizar sus capas celulares básicas, lo que se conoce como "gastrulación". Los hallazgos se publicaron en Developmental Cell.
Así, el descubrimiento permite entender mejor cómo se estructura el corazón en sus primeras fases, lo cual podría ayudar a identificar el origen de algunas malformaciones cardíacas congénitas. Por otra parte, ofrece nuevas estrategias para desarrollar en medicina regenerativa y bioingeniería de tejidos.
Células de origen diferente
Hasta el momento se pensaba que tanto los cardiomiocitos (células que forman el músculo del corazón) como las células del endotelio endocárdico (que recubren el interior del órgano) derivaban de un único grupo precursor.
A partir de este trabajo, que se realizó mediante cultivo artificial de embriones de ratón y utilizando microscopía avanzada junto con técnicas de trazado celular, se descubrió que ambos tipos de células tienen orígenes diferentes dentro del mesodermo, una de las capas germinales del embrión.
Más allá de su desarrollo por separado, estas células ingresan al embrión simultáneamente y migran en forma coordinada hacia la región en donde luego se formará el tubo cardíaco primitivo. Según los investigadores, el comportamiento sincronizado sugiere la existencia de mecanismos de organización muy precisos en fases en donde apenas se formaron estructuras visibles.
A su vez, los científicos observaron que estas células, aunque están destinadas a formar el corazón, también poseen la capacidad de contribuir al desarrollo de otros órganos, lo que refuerza su versatilidad y relevancia en la formación del organismo.
Los autores destacan que este avance ha sido posible gracias a la ciencia básica, que busca comprender lo desconocido sin una aplicación inmediata. “Es importante subrayar la necesidad de apoyar este tipo de investigación, basada en la intuición, la perseverancia y la libertad creativa, como motor fundamental del progreso científico”, concluyeron.
Fuente: SINC.
