El fiscal que investiga la muerte del ex One Direction Liam Payne solicitó llevar a juicio a un mozo y a un empleado del hotel de Palermo, acusados de suministrar cocaína al músico británico, fallecido el 16 de octubre pasado tras arrojarse desde un balcón mientras se encontraba intoxicado con estupefacientes, alcohol y psicofármacos.
Los imputados son Braian Nahuel Paiz (25), quien trabajaba como mozo en un restaurante de Puerto Madero, y Ezequiel David Pereyra (24), empleado del Hotel Casa Sur de Palermo donde se alojó Payne.
El fiscal pidió que ambos sean juzgados por "suministro de estupefacientes a título oneroso, en dos ocasiones para cada uno, con concurso material entre ambas entregas". Este delito conlleva una pena de 4 a 15 años de prisión, indicó el portal Fiscales. Tanto Paiz como Pereyra se encuentran en prisión preventiva.
De acuerdo con la autopsia, el deceso de Payne fue causado por politraumatismos y hemorragias internas y externas, además de detectar alcohol etílico (2.7 g/l), cocaína, metilecgonina, benzoilecgomina, cocaetileno y sertralina en su organismo.
Los peritos del Cuerpo Médico Forense también confirmaron que Payne consumió cocaína tanto por vía nasal (esnifada) como inhalatoria (fumada).
El fiscal basó su acusación en los teléfonos secuestrados (incluido el de Payne), las grabaciones de cámaras de seguridad y las declaraciones testimoniales. A partir de estos elementos, reconstruyó los cuatro incidentes en los que Paiz y Pereyra le suministraron cocaína a Payne.
Uno de los intercambios de mensajes entre Payne y Paiz, ocurrido en la madrugada del 14 de octubre, muestra que el cantante solicitó "4gs" o "5gs" (gramos) de cocaína. Paiz respondió una hora después, diciendo que había conseguido "3 gramos", acompañado de una foto de un polvo blanco en una bolsa transparente. Paiz se dirigió al Hotel Casa Sur a las 3.24, según las cámaras de seguridad, donde entregó la droga a Payne antes de retirarse alrededor de las 8.15.
Horas más tarde, comenzaron a coordinar una nueva entrega, que ocurrió alrededor de las 10.03, cuando Payne abordó un taxi hacia la casa de Paiz en Balvanera. Durante el viaje, el cantante envió mensajes relacionados con la transacción:
10:28:18 a.m. (Paiz): Me acaba de contestar el de la pura, para luego si quieres.
10:28:47 a.m. (Paiz): Saludos, nos vemos cuando puedas, bebé.
8:26:30 p.m. (Payne): Tengo 100 dólares.
8:26:56 p.m. (Payne): Fiesta. Con respecto a Pereyra, el fiscal estableció que también le entregó cocaína a Payne en al menos dos ocasiones. Las pruebas que incriminan a Pereyra incluyen los testimonios de cinco empleados del Hotel Casa Sur y las imágenes de seguridad, así como anotaciones encontradas en el celular de Payne. Uno de los testimonios clave fue el del jefe de mantenimiento, quien declaró haber encontrado a Pereyra con un billete de 100 dólares en la mano. Cuando le preguntó por la propina, Pereyra le explicó que debía "hacer un mandado para un huésped", y luego le aclaró que se trataba de "traer droga". En la madrugada del 15 de octubre, Payne solicitó un taxi para ir a la casa de Pereyra en Lomas de Zamora, donde ambos se encontraron en la calle a las 3.25. Las cámaras de seguridad captaron a Pereyra con "un envoltorio en una de sus manos", lo que coincide con la acusación de entrega de estupefacientes. El fiscal también estableció que el 16 de octubre, entre las 15.30 y 16, Pereyra entregó más cocaína a Payne, menos de una hora antes de la fatal caída del músico. La evidencia incluye los testimonios de un técnico informático del hotel, que presenció una conversación entre Payne y Pereyra en un ascensor, durante la cual Payne le dijo: "I will need another seven grams more for today", lo que indicaría la solicitud de siete gramos más de droga.