El universo está lleno de misterios y sorpresas, y el reciente descubrimiento de un exoplaneta gigante orbitando una pequeña estrella enana roja es uno de ellos. La estrella TOI-6894, ubicada a 238 años luz de distancia, tiene solo el 20% de la masa del Sol, lo que la convierte en una de las estrellas más pequeñas conocidas que alberga un planeta gigante.
El planeta TOI-6894b es un gigante gaseoso similar a Saturno, pero con solo la mitad de su masa. Lo que llama la atención de los astrónomos es que las estrellas enanas rojas no deberían tener suficiente material para formar mundos tan enormes. De hecho, solo alrededor del 1,5% de las enanas rojas albergan planetas gigantes gaseosos, lo que hace que TOI-6894 sea un caso excepcional, según publicó el sitio especializado Space.com.
Ginormous planet discovered around tiny red star challenges our understanding of solar systems
— James Richards (@JamesRicha505) June 5, 2025
Scientists have discovered a giant planet called TOI-6894b, orbiting a star that should be far too small to have formed it. pic.twitter.com/FXgBFvhRPJ
El descubrimiento de TOI-6894b se realizó gracias al Satélite de Sondeo de Exoplanetas en Tránsito (TESS) de la Nasa y se confirmó con observaciones adicionales utilizando el espectrógrafo ESPRESSO en el Very Large Telescope en Chile y el espectrógrafo SPIRou en el Telescopio Canadá-Francia-Hawái en Mauna Kea. Sin embargo, los astrónomos no entienden realmente cómo una estrella con tan poca masa puede formar un planeta tan masivo.
Existen dos modelos para describir la formación de planetas gigantes: la acreción del núcleo y la inestabilidad del disco. La acreción del núcleo implica la formación de un núcleo planetario gigante que atrae gas del disco de formación planetaria circundante. Sin embargo, los cálculos sugieren que el núcleo de TOI-6894b contiene 12 veces la masa de la Tierra, lo que es difícil de explicar dada la pequeña masa de la estrella. La inestabilidad del disco, por otro lado, implica el colapso de una sección del disco formador de planetas debido a su propia gravedad.
El Telescopio Espacial James Webb (JWST) podría potencialmente descubrir la respuesta en la atmósfera del planeta. TOI-6894b orbita cerca de su estrella cada 3,37 días y tiene una temperatura atmosférica de 147 grados Celsius, lo que podría permitir la detección de metano y amoniaco en su atmósfera. Una propuesta para observar la atmósfera de TOI-6894b ya ha sido aceptada para el cuarto ciclo de observaciones científicas del JWST.
Aunque los planetas gigantes alrededor de estrellas enanas rojas son raros, las cifras podrían estar de su lado. Las enanas rojas son el tipo de estrella más común en la galaxia y representan tres cuartas partes de los aproximadamente 100 000 millones de estrellas de la Vía Láctea. Por lo tanto, incluso el 1,5% de 75 000 millones es una cantidad enorme de estrellas enanas rojas que podrían albergar planetas gigantes.